sábado, 30 de abril de 2011

... De la vida.

¿Cómo esconder este amor?
Si algo tan grande no puede ser ocultado.

... De la vida.

¿Cómo equivocarme contigo?
Si eres tú la opción correcta.

... De la vida.

¿Cómo no respirarlo?


Si tanto amor me asfixia....

Cuando eres tú.


Cuando hablas, me pareces todo, la fórmula secreta para darte mil elogios.
Cuando hablas, yo no lo escucho todo, eres tú otra vez durmiendo mis demonios.
Cuando hablas, un susurro acaricia mis oídos, como un abismo, me sumergo en tu voz.
Tú miraste, una vez y otra más, yo dejé de escuchar, porque eso me cohibió.
Cuando hablas, juro por Dios y mi propia fe, que eres un hombre digno y lo que dices me va bien.
Cuando me hablas, algo extraño crece en mí, no lo entiendo ahora, ni después, tal vez jamás.
Cuando detienes tus palabras, la frustración crece en mí, como una mágia sin sentido, tú me vas llevando así...
Cuando hablas, cuando respiras, cuando ingresas mi alma en todo lo que tú eres, cuando caminas y echas a correr los pensamientos que tan absortos se concentran en quien eres, cuando escucho y lo que escucho eres tú, cuando me enamoras, sin siquiera un esfuerzo.
Cuando hablas, yo no pienso en nada, y nada es todo aparte de ti.

jueves, 28 de abril de 2011

... De la vida.

Entonces me pregunté: "¿Por qué las personas que me quieren han empezado a alejarse de mí? ¿Es mi culpa? ¿He estado haciendo algo mal?". Pero, después de cavilar y echarme la culpa hasta el cansancio, pensé: "Quizá esas personas no me quieren del todo, pues el cariño es incondicional y la lealtad... esa nunca falla."

Esto es tan mío que debería ser una curiosidad.

... De la vida.

Me fui de tu lado, y de nuevo tú estabas intentado evitar lo inevitable.

miércoles, 27 de abril de 2011

... Curiosidades.

¡Guao! Hace tiempo que no me miraban así, y sonreían para mí de esa manera, y todo era sencillo en cada acto... ¡Que maravilla has causado, muchacho del nombre que empieza por X!

A veces es tan agradable que un desconocido te sonría, porque tanto él como yo, tenemos problemas, pero... ambos los desconocemos y, por ese diminuto instante, todo parece brillar, la vida parece un arte y, de nuevo lo digo...

... con una sonrisa enamoras.

Esto es tan mío, como también puede ser tuyo si te identificas.

 ♥

martes, 26 de abril de 2011

Quizás, sólo quizás.


¿Adónde va un Te Amo cuando es olvidado?
¿Acaso a la interminable lista de palabras sin significado?
O, quizás, sólo quizás, existe un lugar especial para esa frase, una sección que separe lo que te dije y no era importante con lo que aún sigo diciendo y, aunque lo olvidas, personalmente, me sigue resultando tan imperativo como tu presencia, tan necesario como el aire para mis pulmones, tan inestable que a veces, como la humana predescible y trivial que soy, tiendo a dudar; pero tu indiferente rechazo de nuevo me golpea el pecho y me despierta a media noche como si estuviera a punto de morir ahogada. Oye, mi amor, tus continuos "No" van directo a mi lista de lo que me dicen y no escucho... ¡Qué terca! Te puedo oír decir a mis espaldas; ¡Qué masoquista! Me regaño internamente. Porque el amor es sordo sin fronteras, ciego sin sentidos, sensible sin superficie y jamás mudo, porque dice lo que siente.
Entonces, amor, ¿podrías decírmelo? Cuando olvidas que existo, matas lo que te digo y pasas por alto el que te mire, en ese cuarto de segundo, mientras piensas en ignorarme y ejecutas la acción que complementa lo que hay en tu cabeza, por pequeño que ese instante sea, ¿te has preguntado adónde va lo que acabo de decirte? ¿Podrías responder eso?
¿Adónde van unas caricias cuando carecen de significado?
¿A qué lugar se dirigen las miradas que das por sentado?
Cuando se acaben de manera definitiva los pétalos de mi flor, y yo misma termine de preguntarme si tú me querrás, sólo entonces, mi corazón enamorado entrará en razón y entenderá que las decepciones fueron más que las razones, y será allí, en ese preciso y mágico momento en que te recordaré con cariño, sonreiré y quizás, sólo quizás, logre entenderte.


Cuando algo no tiene gran significado para ti, ¿no te has preguntado adónde viajan esas palabras, esas acciones... ese impulso? O es que quizás, sólo quiás, jamás entran en ti por completo.

domingo, 24 de abril de 2011

Te quiero para mí.

Dentro de la piel llevo encadenado este deseo de besarte... y no puedo.
Impregnado en la piel, como celos que juegan con el rumbo de mil pensamientos, se encuentran la curiosidad y la imaginación... y juegan juntas como pequeñas niñas juegan con sus muñecas, manejan mi cabeza y se burlan en la incertidumbre de lo que eres, me entra en la cabeza que eres arrogante y un poco violento, se me escapa de las manos el ridículo príncipe que sueño y no existe. Pero sólo es eso, otra desilusión, pero tú sigues vivo en mis escritos, ese mundo loco que es el único que puedo crear a mi antojo y destruir cuando tú lo cambias todo con una sóla mirada, con un sólo roce sin significado personal... Generalizando, eres tan imperfecto que me encantas, eres tan idiota que quiero corregirte, dices muchas malas palabras y luego pareces arrepentido, pero ¡Maldición! Te quiero todo para mí.
Conoce de una vez a tu sombra; "Me llamo como me llamo y te sigo a todas partes".
Aunque no sepas que existo, es suficiente para mí saber que tú lo haces. Me has enamorado, y te quiero todo para mí. Eres pesado como una roca y en mi cabeza... mi cabeza, de allí no sales, amor, y te aseguro que allí te quedarás gran parte de mi tiempo, pues... te quiero para mí. No vayas a fallarle a esta desconocida, no vayas a ponerte esa mal nacida camisa, sigue corriendo tras la pelota y continúa ignorando a esta grandísima tonta. Continúa siendo un sueño, sigue creando cosas sucias... a mi pesar.
¡Cuánto te odio por ser al que quiero! Y lo digo de nuevo, te quiero a mi pesar, te miro sin parar.

De nuevo me dirigo a ti, que quieres tanto a esa persona, que tanto la aprecias y observas continuamente, que es más importante que nada y lo das todo por ella... pero ¿qué hacer si no sabe que existe?
Sólo que ahora le agregué la furia comprimida de una persona tan ignorada... como enamorada.

domingo, 17 de abril de 2011

... De la vida.

Déjame adivinar...




... ¿es la primera vez que sientes
algo así por alguien?

No sientas miedo.

Muchas veces miré atrás, pero... ¿qué gané con eso? ¿La imágen borrosa de un error que hoy me veo obligada a arreglar? ¿Revivir algo que no volverá? No digo que el pasado no debe importar, sólo que olvidarlo me caerá mejor y aprender de él será el único provecho que me dará.
Por eso digo:
   No le tengas miedo a vivir, porque para eso estamos aquí.
   No le temas a vencer, si después de tanto fallar ya era tu turno.
   No le tengas miedo a mirar en los ojos de esa persona, que al mirar no hacen falta palabras.
   No le temas a no saber bailar, eso te da motivos para saltar, para hacer las cosas a tu manera.
   No te temas a ser diferente, pues, desde el momento de nuestro nacimiento, ya todos lo somos.
   No le tengas miedo a dejar de sobrevivir, empieza a vivir.
   No le tengas miedo a la oscuridad, que ya la luz vendrá.
   No temas llorar un poco cuando estés triste, pero procura llorar mucho cuando seas feliz.
   No le temas a las alturas, pues volar las amerita.
Sólo ténle miedo a una sóla cosa:
                                    A dejarte intimidar por el temor.

Sentir miedo está bien, lo que está verdaderamenre mal es frenar nuestros sueños por miedo al fracaso, pero no existe el verdadero "fracaso" cuando hablamos de un intento fallido. Toma el aprendizaje que esa experiencia te dejó y aplícalo en el siguiente intento; de esa manera los grandes sabios llegaron a ser lo que son.
Hoy me siento bien conmigo misma y mis metas, por eso he creado este escrito de motivación. No hay nada más libre que crear un sueño, nada más difícil que emprender la búsqueda de su realización y nada más satisfactorio que encontrarla.

Atentamente, otra soñadora más del montón.

lunes, 4 de abril de 2011

... De la vida.

No intentes tanto descubrir qué es el amor, pues podrías tú mismo darle respuesta a tu propia pregunta.

domingo, 3 de abril de 2011

... De la vida.

Una vez toqué una puerta y no me abrieron: "Está bien", dije, "Regresaré mañana". Y así lo hice, al día siguiente, toqué la puerta y esta vez sí me recibieron... y con una buena noticia. 

viernes, 1 de abril de 2011

Tus locuras.


El hechizo de la noche ha empezado a ocasionar efectos secundarios en ti, estás hablando sin sentido y cada vez logras asustarme más, supongo que la oscuridad le da paso a tus secretos, a la onda de locura que llevas impregnada de manera furtiva en la piel; y sonríes, como si ese instante dependiera de eso, y caminas extraño, como si quisieras desviar la atención, y de nuevo estoy yo a tu lado, porque me haces reír, porque me alejas de la realidad, porque me sumerges en un mundo que no existe, pero es perfecto porque juntos lo creamos, porque, al emerger, allá afuera todo parece mejor y aún así, existe ese momento en que debemos separarnos; pero una tarde contigo es una noche pensándote, porque un beso tuyo es toda una alegría comprimida; jamás pensé que me conformaría con tan poco, pero tú eres mi felicidad.
Tus locuras están impresas en mi corazón, son delirios de una perfección que sólo existe en tus defectos, y amo cada espacio de tu cuerpo, cada centímetro que mide tu sonrisa, cada extensión del brillo en tus ojos, amo cuando me haces reír, tus ocurrencias, cuando no tomas las cosas muy en serio y eres un poco indiferente, odio tu impuntualidad, pero me gusta el niño que hay dentro de ti y las fantasías que éste me cuenta. Me encanta poder mostrar mi sonrisa y que seas tú el causante de ésta.

De algo siempre he estado segura, y es que, si hay algo tan fundamental como el amor en una relación, existe también el sentido del humor. Reírse junto a tu pareja no puede compararse con nada, compartir sonrisas es maravilloso.